La Dra. Nadine Kaslow, Presidenta Electa de la Asociación Americana de Psicología, es una experta en suicidio en jóvenes que ha dedicado gran parte de su carrera a tratar adolescentes suicidas y a familias que han perdido a seres queridos debido al suicidio. Este artículo es un extracto de la charla que dió para el programa Speak Up for Kids en Mayo de 2013.
Por la Dra. Nadine Kaslow
Uno de los mitos existentes sobre las personas que hablan de suicidarse, y aquellos que realmente lo intentan, es que se trata simplemente de una llamada de atención o de una petición de ayuda. Los niños que hablan o escriben acerca de matarse no son tomados en serio y se les considera excesivamente melodramáticos: ¡obviamente no lo dicen en serio! Pero no debemos nunca ignorar una amenaza de suicidio, incluso cuando provenga de una niña que ha amenazado con suicidarse ya tantas veces que estamos tentados a dejar de tomarla en serio. Es importante responder seria y cuidadosamente a dichas amenazas y a otras señales de advertencia. Estas no significan que un niño vaya a intentar suicidarse. Pero es una posibilidad que no se puede descartar.
Cuando se reflexiona sobre este tema, resulta útil conocer los factores que hacen que los más jóvenes sean más o menos propensos a considerar o intentar suicidarse. ¿Qué sabemos de los jóvenes que intentan quitarse la vida, o de aquellos que finalmente mueren por suicidio? Analicemos los factores de riesgo (aquellos que aumentan las probabilidades de que un niño manifieste conductas suicidas) y los factores protectores, es decir, aquellos que reducen el riesgo.
Si un niño tiene muchos factores de riesgo y apenas factores protectores, es razón suficiente para preocuparse sumamente por él. Por otro lado, si tiene una cantidad razonable de factores de riesgo pero tiene muchos factores protectores, puede preocuparse algo menos, aunque aún así, por supuesto, debe seguir preocupándose por él.
Algunos factores de riesgo:
¿Y qué de los factores protectores? ¿Qué cosas pueden mitigar el riesgo de involucrarse en comportamiento suicida?
Aquí hay algunos factores protectores claves:
Entonces, ¿qué debe hacer si su hijo encaja en el perfil de alguien que está en peligro de suicidarse? Las señales de alerta que se deben tener pendientes incluyen cambios en la personalidad o del comportamiento que pueden no estar obviamente relacionados con el suicidio. Cuando un adolescente se pone triste, más introvertido, más irritable, ansioso, cansado, o apático; las cosas que antes les parecían divertidas ya no lo son, entonces usted debe preocuparse. Cambios en los hábitos de sueño o hábitos alimenticios, también pueden ser indicios.
Actuar de manera errática o temeraria es también una señal de alerta. Si un adolescente comienza a tomar malas decisiones, o si comienza a hacer cosas que son dañinas para sí mismo o para otras personas, como acoso o peleas, puede ser una señal de que está perdiendo el control.
Y, finalmente, si un niño está hablando sobre morirse, debe siempre prestar atención. "Quisiera estar muerto". "Sólo quiero desaparecer". "Quizás debo saltar de ese edificio". "Quizás debo darme un tiro". "Todos estarían mejor si yo no estuviera aquí". Cuando escuche este tipo de comentarios, es importante que los tome en serio; aún si no puede imaginar que su hijo lo diga en serio.
Nadine Kaslow, PhD, Presidenta Electa de la Asociación Americana de Psicología de 2014, Vicepresidenta de Desarrollo de la Facultad del Departamento de Psiquiatría y Ciencias de la Conducta de Emory University y Psicóloga Jefe del Hospital Grady Memorial.
Original:http://www.childmind.org/en/posts/articles/2013-11-5-risk-factors-teen-suicide